Por G. Adolfo Ruiz J.

México, D.F.,  24 de junio de 2015.-  Para dar a conocer cómo afecta el sobrepeso y la obesidad particularmente en la mujeres, la farmacéutica Ifa Celtis, representada por Alexis Bolio; director general  realizó una conferencia con varios expertos con el tema, “Ser mujer podría ser un factor obesigénico”, ya que la  prevalencia de obesidad y el sobrepeso en México es 3.6% mayor en las mujeres que en los hombres.

El Dr. Osama Hamdy, Director Médico del programa clínico de Obesidad en la  Clínica de Joslin en Boston, comentó: “La obesidad es un problema creciente, al grado de alcanzar proporciones epidémicas a nivel mundial.” Cada año mueren alrededor de 2.8 millones de personas a causa de la obesidad o sobrepeso, el 44% de la carga de diabetes y entre el 7% y el 41 % de la carga de algunos tipos de cáncer son atribuibles a la obesidad. (1)

En el caso particular de obesidad femenina, se ha registrado un aumento significativo en los últimos años, de 1988 a 2012, la obesidad en mujeres de 20 a 49 años de edad se incrementó de 9.5 a 35.2% (4),  de acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT 2012), se demostró que la obesidad y el sobrepeso es 3.6% mayor en las mujeres que en los hombres.

En México, el 73% de las mujeres sufre algún grado de obesidad o sobrepeso  esto se encuentra relacionado con diversos factores como  la conducta alimentaria, falta de actividad física y los patrones de consumo de alimentos. Sin embargo, existen otros factores que no pueden ser controlados o modificados  como son los antecedentes genéticos, la edad, cambios hormonales así como los efectos secundarios de medicamentos como anticonceptivos hormonales y antidepresivos, el embarazo y la lactancia.

Para las mujeres, las hormonas son un factor importante que contribuye a la obesidad y sobrepeso. Por ejemplo, a partir de los 30 años comienza una disminución paulatina y lenta de la masa muscular (sarcopenia), debido a la disminución de la hormona de crecimiento, y se acumula grasa, dando origen a la obesidad.

En la etapa peri-menopáusica comienzan a bajar los niveles de estrógeno, lo que provoca un incremento en el peso corporal y mayor depósito de grasa central intraabdominal, a pesar de su estilo de vida y su régimen alimenticio. En los hombres la circunferencia abdominal debe ser de 80  y 90 centímetros en las mujeres, es importante conocer el IMC (índice de masa corporal) que debe ser de 24,5.

Asimismo el Dr. Julio Morfin, Director de la Clínica de Climaterio de Santa Teresa México explicó, al respecto a las afectaciones que provoca la obesidad en las mujeres,  “Las consecuencias de la obesidad femenina son serias, tanto en el aspecto psicosocial como para la salud de las mujeres. La obesidad aumenta el riesgo de infertilidad, ovarios poliquísticos, pre-eclampsia, diabetes gestacional y complicaciones obstétricas en el momento del parto en la mujer en edad reproductiva.”

Es importante concentrar los esfuerzos para continuar con las estrategias de prevención de esta enfermedad, que hasta ahora se han llevado a cabo en México, actualmente no existe evidencia que permita inferir que la obesidad disminuirá en el país. Por ello, las políticas públicas para su prevención y control deberán intensificarse y mejorarse.

En su oportunidad el Dr. Pedro Gutiérrez Castrellón, Director del Centro de Investigación Transnacional en el Hospital Manuel Gea González, expresó su preocupación por la situación en nuestro país y señaló: “Debemos seguir fomentando el diseño de nuevas estrategias de prevención y tratamiento, para disminuir la incidencia de pacientes obesos”

La pérdida de peso debe ser el tratamiento inicial en las  pacientes que asistan a recibir atención médica; cuando la dieta y el ejercicio no son suficientes existen tratamientos coadyuvantes para lograr las metas de manera integral y personalizada que solo el médico puede indicar, acotó.

Los especialistas concluyeron la  importancia del tratamiento adecuado del sobrepeso y la obesidad por un agrupo multidisciplinario (médico, nutriólogo, endocrinólogo, ginecólogo (en las mujeres), entre otros. Así como adoptar medidas saludables como disminuir las grasas, azucares refinados (refrescos), evitar el alcohol y el tabaco, realizar actividad física aeróbica, pero sobre todo acudir con el profesional de la salud para diagnóstico y tratamiento adecuado de esta enfermedad que puede provocar diabetes, hipertensión y cáncer que complican la salud y llegan producir fallecimientos por estas causas.